PWR (POWER - TO - WEIGHT RATIO) o en español La Relación Peso - Potencia
Todos sabemos cuales son las cosas importantes a las que les tenemos que poner toda nuestra atención y esfuerzo. Trabajar en fortalezas y no tanto en debilidades es un consejo que da Peter Drucker en su legendario libro para HBS, Managing Yourself. Vivimos sumergidos en tanta información, tantos nuevos intelectuales y filósofos dando consejos, tantos buenos libros, podcasts, etc., que la tarea de ejecutar apenas algo de todo esto puede ser abrumador. En el fondo sabemos qué proyectos o emprendimientos nos van a sumar más, qué prácticas y hábitos podemos implementar fácilmente. Saber escoger entre cosas importantes y el ahorro, la inversión, el enfoque, será similar a la fuerza aplicada o al poder (la P en PWR)… y todo lo que no carguemos de más, para efectos de similitud con el PWR será aquello que dejemos de comprar, gastar, comer y distraernos (la W en PWR).
Existen ejemplos complejos de la física aplicada a la ecuación de la relación peso - potencia, pero un ejemplo cercano en estas fechas es que con tanta comida y excesos, en donde por más que tu bicicleta sea ligera (la mía pesa 7.8kg) subir cualquier montaña no será en nuestro mejor tiempo personal o PR. El peso y masa muscular que hemos construido o perdido será clave en el resultado de cómo y qué tan rápido logramos llegar a la cima.
Entre más ligeros estamos (somos) menos trabajo nos cuesta llegar a la meta.
La idea de cargar con poco y aplicar mucha fuerza a lo que hacemos suena lógico conceptualmente pero es un gran reto tomar las pequeñas decisiones que hacen la diferencia. La decisión de tan solo levantarse, vestirse y servirse un café antes de empezar a hacer ejercicio puede ser un esfuerzo titánico al principio. De igual manera las decisiones de no gastar en cosas que poco a poco se vuelven toneladas de peso (la W en PWR), decidir no comprar algo por Amazon o no comer en X restaurante, saber escoger las cosas que van a durar más para no tener que estar comprando fast fashion, saber qué alimentos nos van a producir mayor beneficio, rendimiento energético y de salud, puede ser tan difícil… pero son todas estas decisiones las que entran en la ecuación.
Otra cosa que juega en la P de PWR es el conocimiento, tratemos de aplicar una de las tantas cosas que leemos y escuchamos en Podcasts, de los libros que hemos pedido y hemos devorado pero que difícilmente damos seguimiento. Esto suma al Poder… y ya que vamos ligeros tratando de cargar con menos, seguro esto nos va a abrir puertas, nos hará conectar con gente que está en el mismo canal y se traducirá en acciones. Personalmente cierro el 2023 y empiezo el año con tres libros que dentro de tantas tantas cosas que he leído y escuchado creo que pueden ser buenos para aplicar en el 2024, uno es el libro sobre Naval Ravikant, The Almanac of Naval Ravikant por Eric Jorgenson, que me acaban de regalar de Navidad, sigo recomendando muchísimo Outlive de Peter Attia para todo lo relacionado con salud, ejercicio, nutrición y el otro es The Psychology of Money de Morgan Housel.
Por último también seamos ligeros y selectivos de las personas que nos rodeamos, existe este concepto ya antiguo del Master Mind por Napoleón Hill, en donde un grupo de personas ya sea que conocemos o que admiramos y su forma de ser y pensar nos influyen en el día día, tengamos grandes amigos y mentores más que amistades que nos restan, que quizás nos envidian o no nos aportan. Nada más potente que la sabiduría de nuestros hijos y de nuestra pareja, esos están en primer lugar dentro de nuestro Master Mind y después los grandes amigos que verdaderamente te suman… Y está la famosa máxima que dice que somos el promedio de las 5 personas con las que más convivimos, ahí se los dejo de tarea.
Les deseo que logremos tener la relación (R) entre discernir y escoger a lo que nos vamos a enfocar con toda la fuerza y potencia que tenemos, como un coche de carreras o un ciclista subiendo el Alpe d’Huez… para nuestro éxito en el 2024.
Lo mejor,
H.